En casi todas las reformas americanas que veo por la tele, colocan una puerta de granero. Ya sea en el cuarto de la colada (todos tienen uno, no como aquí), en el baño, como despensa… para darle un toque vintage-industrial que mola mucho.













El problema es que a España aún no han llegado y me tengo que conformar con algo así (que tampoco está nada mal):

De hecho, mi plan es colocar esta puerta en el cuarto de baño y, en el resto de la casa, un modelo similar a este que me dejaría el piso como nuevo!!

De momento, he quitado las puertas del salón-comedor (era una normal y otra más pequeña), ya que siempre las teníamos abiertas de par en par.




Es muy sencillo: desatornillas las bisagras de las puertas, tapas los huecos que dejan con masilla especial que parece madera y luego pintas. En mi caso, como el resto de puertas las quiero poner blancas y para que se mimetizara con la pared, le dí varias capas de esmalte especial para lacar madera en color blanco. Y este ha sido el resultado:



Con la puerta de la cocina quería hacer algo diferente y ponerla de cristal corredera. Así ahorraba espacio y ganaba luz.


He mantenido el marco de madera y lo he pintado en gris plata, para que tuviera un efecto metalizado. Y así ha quedado:


¡Ciérrate sésamo! ;p


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