Hoy toca un DIY muy sencillo y tradicional: un recetario. La idea la cogí de la Feria creativa que se celebró en Valencia el pasado 22 de Abril y en la cual compré el kit que sirve para decorar el recetario.

Resulta que tengo un montón de papeles impresos con recetas o minilibros de los cuales solo me sirven algunas y creo que esta es la mejor manera (hay veces que lo tradicional es lo mejor) de tenerlas todas agrupadas y clasificadas.

Materiales:

• Carpesano pequeño. Podéis reutilizar uno viejo que tengáis, ya que irá forrado.
• Hojas para carpesano pequeño. Yo he elegido las de una línea, pero tenéis de cuadros, doble línea…
• Cartulinas tamaño folio con diferentes colores o estampados.
• Tela.
• Kit de recetario.
• Tijeras, rotulador, pegamento…

Lo primero es pasar a limpio todas las recetas que tengáis, poniendo cada una de ellas en una hoja.

Para hacer los separadores, partiremos las cartulinas tamaño folio por la mitad. Al quedarse un tamaño mayor que una cuartilla, sobresale por los lados y podemos darle forma a una solapa poniendo el nombre del apartado.

Para forrar el carpesano hay dos opciones: pegando la tela con cola especial o, si eres mañosa y sabes coser, haciendo una funda a medida. Tambien venden tela adhesiva.

La decoración también puede ir cosida o pegada.

Para dejar aseada la parte interior, he pegado papel decorado, tapando la terminacion de la tela.

Y, por último, el kit incluye una tacita y otras figuras muy chiquitinas que se ponen al final de una cinta y se utilizan como marca-páginas.

¿Habéis visto que Do It Yourself más práctico, original y tradicional?

¡Lo podéis hacer para vosotros mismos o para regalar!